¿Sabes que la preparación de los pedidos, o picking, es el proceso que más recursos consume en el conjunto de tareas que se realizan en un almacén?
Por eso elegir la fórmula que más se ajuste a las necesidades de tu empresa es tan importante.
Hay que dar en el centro de la diana e implementar el sistema correcto, porque de nada sirve tener el más sofisticado si lo infrautilizas. Y al revés, si tu método de preparación se queda corto, estarás perdiendo tiempo y dinero.
Vamos a ver cuáles son los tipos de picking más interesantes y para qué tamaño de negocios podrían ser recomendables.
La importancia del picking, o preparación de los pedidos
Cuando entra un pedido en tu empresa, se ponen en marcha una serie de acciones que tienen un único objetivo: que el cliente reciba lo que pidió de tal forma que quede 100% satisfecho con el servicio que ha recibido.
Por eso el picking, o conjunto de procesos que intervienen en la preparación de un pedido, es tan importante: porque repercute directamente en la satisfacción final de clientes y usuarios, y puede ser una ventaja competitiva clave para la evolución empresa.
De igual manera, un picking ineficiente va a suponer un alto coste, que se traducirá en pérdida de confianza y de reputación, con todas las consecuencias negativas que puede implicar para el negocio.
Estos son los principales tipos de picking
La gestión de los pedidos en almacén ha evolucionado muchísimo en los últimos años. Primero, gracias a las aplicaciones logísticas de las nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) y actualmente con la implementación de automatizaciones del universo de la logística 4.0.
Desde la hoja de Excel hasta la realidad aumentada, los sistemas de picking han hecho un largo viaje. Estos son los principales sistemas que debes conocer:
1. En papel
Es el sistema más básico. El operario prepara los pedidos siguiendo una lista en papel. El proceso se realiza completamente de forma manual. Es un método poco operativo incluso para almacenes pequeños.
2. Radiofrecuencia
La transmisión de datos mediante la instalación de terminales de radiofrecuencia mejora notablemente la eficacia de la preparación de pedidos.
El operario lleva consigo uno de estos terminales (puede ser un dispositivo de mano, o incluso ir fijado a la muñeca con una pulsera o brazalete),y tiene acceso en todo momento a los datos que necesita, que están coordinados por el Software de Gestión de Almacén (SGA).
3. Pick to light y put to light
En almacenes que tramitan muchas órdenes y necesitan agilidad para prepararlas expediciones, el sistema pick to light puede ser el indicado.
Se organiza el almacén con estanterías en cuya parte frontal se instala un indicador luminoso. En él se señala el artículo a seleccionar y en qué cantidad. Luego, el sistema put to light indica dónde debe ser depositado.
El operario solo debe seguir las indicaciones luminosas, lo que facilita mucho la tarea.
4. Por voz
El operario recibe instrucciones a través de unos auriculares y a su vez, emite confirmaciones por micrófono. El SGA coordina todo el proceso.
La ventaja de este sistema es que el trabajador no tiene que realizar consultas, sino seguir las instrucciones. Por otra parte, al ser un sistema “manos libres” se agilizan mucho las operaciones.
5. Visual con Realidad Aumentada
Es el método de preparación de pedidos más avanzado y también más costoso, combinación del anterior sistema por voz más unas gafas de realidad aumentada.
A través del display virtual, el operario ve cuáles son los artículos a seleccionar y el número. El control por voz completa el sistema, con las confirmación de pedidos.
¿Quieres saber más sobre cada uno de estos sistemas? Aquí tienes más información: Del papel al picking visual con realidad aumentada.
Ten estas 3 cosas en cuenta para elegir tu método de picking
¿Cómo saber qué tipo de sistema de preparación de pedidos conviene a tu empresa? Antes de ponerse en marcha es más que recomendable pedir asesoramiento profesional y realizar un estudio.
De entre todos los factores que hay que barajar, los más importantes son estos:
- Estimación del ROI. El retorno de la inversión es una de las métricas que hay que tener en cuenta a la hora de analizar la conveniencia de hacer una mejora en la empresa. ¿Cuánto tiempo vamos a tardar en recuperar el dinero invertido? El ROI es uno de los factores que nos van a ayudar tomar la decisión.
- Volumen de pedidos y previsión de crecimiento. ¿Cuántos pedidos diarios puede expedir tu almacén? Debemos tener en cuenta tanto la actividad en el momento actual como las previsiones, para no elegir un sistema “con fecha de caducidad”, es decir, que se quede corto en el corto o medio plazo.
- Características del producto y del almacén. Las necesidades de manipulación varían mucho de un tipo de producto a otro. Por ejemplo, no es lo mismo organizar el picking para una empresa de bisutería que para otra que venda sofás. Los costes de almacenamiento, de manipulación, de packaging… son muy diferentes.
¿Te ayudamos a elegir el tipo de picking que más conviene a tu empresa?
Para poder elegir el tipo de picking más adecuado para tu negocio, según su tamaño y el volumen de pedidos, lo más importante es hacer un análisis previo para detectar las necesidades concretas.
De esa forma, estarás seguro de implementar un sistema eficiente y con un presupuesto ajustado.
¿Quieres que lo estudiemos? Ponte en contacto con nosotros y buscamos el tipo de picking perfecto para tu empresa.